Secuestrante de metales, especialmente indicado para hierro, manganeso y cobalto. Reacciona con los metales disueltos en el agua formando una molécula muy estable, evitando que puedan oxidarse y manchar la superficie o colorear el agua.
Es estable al cloro, por lo que su efecto es de larga duración.
- Dosis de empleo inicial: 1,5 L/100 m3.
- Mantenimiento: 0,5 L/100 m3.
- Formato: 1,2 kg
Ficha técnica